Intervención en el Congreso de la Asociación de Directoras Y Gerentes de Servicios sociales. Madrid Octubre de 2011.
Vivimos tiempos de enorme incertidumbre. Las brújulas ya no indican el norte. ¿Hay que ir al norte? Cada día nos trae una nueva novedad que nos golpea. Ya no existen seguridades ni puntos de vista definitivos. Todo parece relativo. No sabemos que hacer. Todo parece confuso. Y en el futuro sólo se advierten negros
nubarrones.
José Antonio Labordeta lo reflejaba perfectamente en el tema que daba título a su
album de 1985 Aguantando el temporal.y que rezaba así:
“Seguimos por aquí, aguantando el temporal.
Cada uno lo soporta, cada uno lo soporta,
Según como le va, según como le va”
Y en medio de esta situación, los compañeros y compañeras de la Asociación de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales han tenido la idea de pedirme que hable, para comenzar este Congreso, sobre: “Crisis y oportunidades”.
No se que merecimientos tengo más allá de la amistad que me une con los organizadores. Aunque pensándolo bien, tal vez sea que no me quieren tan bien como supongo.
Fuera de bromas. El título de la intervención parte de una reflexión que los occidentales venimos haciendo, con no poca asiduidad, respecto a la composición que la palabra crisis tiene en chino mandarín.
Los primeros en darse cuenta de la gracia fueron los estudiosos en marketing, que suelen estar a la que cae. Y después, los demás, nos hemos venido aprovechando de ella.
Crisis en chino contiene los conceptos de peligro y de oportunidad….