Cuestión Conceptual: Porqué no es conveniente un “rescate”
Responder con un “rescate” a las situaciones de pobreza lleva a confundir a la opinión pública, al sugerir que nos encontramos ante una situación excepcional, en la cual los cientos de miles de familias y personas empobrecidas son sólo los restos de una catástrofe a los que hay que “rescatar”.
Ese rescate refuerza uno de los principales engaños de las políticas ultraliberales: que todo se debe a una coyuntura adversa de la economía, que sólo se puede resolver con el crecimiento del PIB, y que este crecimiento por sí solo, poco a poco,
hará que toda la sociedad mejore.
Pero las situaciones de pobreza no son los restos de la crisis que poco a poco superaremos y a los que hay que atender mientras tanto, sino que configuran un rasgo estructural del nuevo modelo de sociedad, que forman parte de su ADN como
consecuencia de unas políticas que mantienen no solo unos niveles de pobreza que afectan a amplios sectores de la población, sino que consagran las desigualdades y limitan las oportunidades de mejora para la inmensa mayoría de la población.
Por eso no podemos afrontar las situaciones de pobreza y de precariedad con iniciativas de “rescate” sino con cambios en las políticas que las generan y mantienen:
Un nuevo modelo de desarrollo económico que apueste por I+D+I y en el que la competitividad no se logre exclusivamente mediante la sobreexplotación de trabajadores/as
Mejorar la protección laboral (salarios, estabilidad, mecanismos de defensa colectivos)
Medidas que impulsen una fiscalidad con más capacidad recaudatoria y con mayor progresividad.
Reforzar las políticas sociales y corregir los recortes que se han llevado a cabo.
Cuestión competencial. Porqué no es posible un “rescate” a nivel estatal.
Las medidas de protección a las personas y familias más empobrecidas, para garantizar de forma inmediata la cobertura de sus necesidades básicas y para una vida digna, forman parte de políticas cuya competencia corresponde a las Comunidades Autónomas y a las Entidades Locales. Por eso cualquier iniciativa “de rescate”, si lo que pretende son atenciones urgentes, inmediatas, de protección social básica, no pueden llevarse a cabo desde organismos estatales que ni tienen competencia en esas materias ni estructuras gestoras descentralizadas en el nivel de proximidad necesario para ello.
Pacto de Gobierno sobre política social. Alternativas a una ley de rescate ciudadano. pdf