NOTA DE PRENSA

UNA GRAN ALIANZA POR LOS SERVICIOS SANITARIOS Y SOCIALES FRENTE AL ENGAÑO DEL ESPACIO SOCIOSANITARIO

Las personas más vulnerables necesitan servicios sociales y sanitarios coordinados: el galimatias del espacio sociosanitario. Vivimos en una etapa de destrucción progresiva del derecho a la salud de todas las personas y de demolición del sistema de servicios sociales: en este contexto el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad vuelve a poner sobre la mesa la prioridad de avanzar en la «construcción del espacio único sociosanitario». En el año 2011 fue el Libro Blanco de la Coordinación Sociosanitaria, en el 2012 la propuesta de un «gran pacto sociosanitario», en 2013 el «espacio sociosanitario» y en 2014 seguimos con la ceremonia de confusión.

Se presenta el manifiesto para una Gran Alianza por los Servicios Sanitarios y Sociales y las valoraciones sobre el engaño del espacio sociosanitario que propone el gobierno. La realidad es que se derriba el todavía frágil Sistema de Servicios Sociales y se reducen, cuando no se suprimen, prestaciones sanitarias. Quizás, cuando hablan de agentes sociales, se refieran a los lobbies empresariales, para los que tanto la sanidad como los servicios sociales son, exclusivamente, «oportunidades de negocio», como bien han proclamado algunos dirigentes políticos y consejeros autonómicos. Y quizás también, cuando dicen…»avanzar en…» se refieran a seguir el proceso iniciado hasta hacer desaparecer los servicios y prestaciones por dependencia y privatizar la sanidad pública. Esto lo vemos como lo más real:

1. La incorporación de nuevos beneficiarios del Sistema de Atención a la Dependencia solo se produce en la medida en la que se van dando bajas entre los 750.000 atendidos. Tenemos 190.000 personas con el derecho otorgado a la atención y que no la reciben, es el llamado limbo de la dependencia. Y tenemos personas dependientes en espera de que se les otorgue ese derecho que, de seguir los tiempos actuales de atención, tardarían 80 años en poder recibir el servicio.

2. El Sistema de Atención Sanitaria está en peligro más allá de los intentos privatizadores de algunas Comunidades como Madrid, Valencia, Galicia, etc, porque cada vez más servicios pasan a manos privadas (limpieza, laboratorios, extracción de sangre,..) y las derivaciones al Sistema privado de provisión es una estrategia de deterioro de lo público para conseguir el deseo de oportunidad de negocio. Pero dentro de la Sanidad, la atención socio-sanitaria es un peor negocio, no interesa, consume recursos y da pocos beneficios, por eso España tiene un bajo «índice de camas/1000 habitantes», un 0,7% frente al 1,4% de los países de la OCDE. para pacientes crónicos; la atención domiciliaria es mínima y no alcanza el 11% de cobertura aconsejado para mayores de 65 años.

Si el Pacto se plantease desde los sistemas públicos de Salud y Servicios Sociales, las cosas serían diferentes. Se volvería a incidir en que el sistema de salud se hiciese cargo totalmente de las prestaciones sanitarias que se desarrollan en Residencias de Mayores, Centros de Día, Albergues, etc con una completa atención médica, farmacéutica, y de rehabilitación, como unos ciudadanos más pertenecientes a una Zona Básica de Salud. Por su parte el Sistema de Servicios Sociales ha de hacerse cargo de las prestaciones de apoyo a la familia y y convivencia para la inclusión social que todavía realizan algunos servicios sanitarios. Y, por supuesto, será imprescindible mejorar la coordinación socio-sanitaria a todos los niveles asistenciales de Atención Primaria y Especializada, niveles directivos, de Planificación y de Gestión, creando protocolos de actuación que disminuyan el esfuerzo, los tiempos y el gasto sanitario y social.

Coincidimos en la necesidad de cambios en los sistemas públicos de salud y de servicios sociales. En el sistema de salud, por la necesidad de adaptación a los cambios demográficos y epidemiológicos y la reorientación de la atención al paciente con enfermedad crónica y, en el sistema de servicios sociales en la necesidad de simplificar y agilizar procedimientos y en aumentar su escaso nivel de cobertura. Sin embargo, nada en el discurso del Ministerio responsable de ambos sistemas hace prever un itinerario en este sentido sino, como señalábamos al principio, a minimizar su capacidad y su potencial para la atención sociosanitaria.

Creemos que la coordinación y la atención sociosanitaria, solo se garantizan desde ambos sistemas públicos. Si no es así, la atención sociosanitaria será la «tercera red» o el «espacio sociosanitario» en manos del mercado, parcialmente financiado con fondos públicos.

Insistimos en que cada sistema público ha de asumir la responsabilidad de la financiación, la supervisión y el control de calidad de las prestaciones de su competencia, vivan donde vivan las personas que las necesitan

Reclamamos la prioridad de los cuidados en el hogar, que a su vez exige prestaciones sanitarias y prestaciones sociales de una atención primaria coordinada de ambos sistemas,.

Las Asociaciones, FADSP y ADYGSS, creemos en un modelo de atención público, coordinado desde ambos sistemas y con el único objetivo de ofrecer a las personas en situación de dependencia una atención digna, sostenible y eficaz, y por ello firmamos hoy una Alianza de colaboración que queremos extender a todas las Asociaciones sanitarias y sociales que compartan este mismo objetivo.

Para más información: José Manuel Ramírez

Marciano Sánchez